Los RTS temáticos cobran vida una vez más con Warhammer Age of Sigmar: Realms of Ruin y sus DLC

Por Marcos Wagih

Warhammer Age of Sigmar: Realms of Ruin acaba de estrenar sus dos primeros DLC y, siendo sincero, creo que no existía mejor excusa para regresar al que dice ser uno de los universos más emblemáticos de la historia. No por nada, aunque el juego de mesa de Games Workshop lleva años haciendo de las suyas, disfrutar de él en tiempo real es algo que no suele ser excepcionalmente habitual.

A lo largo de los años, Warhammer ha dado mucho de sí, tanto en su vertiente original como en sus variantes en la industria del videojuego. En esta última, el ya mencionado Warhammer Age of Sigmar: Realms of Ruin dice ser uno de sus proyectos más ambiciosos… Y se nota. Para quienes no lo conozcan, se trata de un RTS ambientado en el brutal universo de AOS O lo que es lo mismo, es un juego de estrategia en tiempo real construido a través de las singularidades narrativas de una de sus narrativas más sangrientas.

Sin duda, esto es uno de sus aspectos más particulares. De hecho, llama muchísimo la atención desde el primer momento gracias a esto, aunque lo que verdaderamente me ha terminado de conquistar ha sido su dirección artística. Todo sea dicho, soy poco más que un jugador casual de Warhammer, por lo que desconozco cuál será la perspectiva de un avezado en la materia. Lo que sí soy es un viciado empedernido. O lo que es lo mismo, llevo jugando tanto tiempo que ya ni recuerdo cuándo empecé.

Warhammer Age of Sigmar: Realms of Ruin, un RTS con mucha personalidad

Aparte, siempre he disfrutado mucho de los títulos de estrategia. Lo que quiero decir con todo esto es que era relativamente fácil que Warhammer Age of Sigmar: Realms of Ruin me entrase muy bien. Ahora bien, ¿lo ha conseguido? Pues lo cierto es que sí, puesto que he disfrutado bastante de la experiencia en líneas generales. Y si bien es cierto que tiene problemas con la Inteligencia Artificial de sus unidades y que necesita alguna capa adicional de optimizado, en general ofrece sensaciones bastante positivas.

A pesar de que no reinventa el género, ha sido capaz de encontrar su hueco gracias a sus personajes. En una singularidad bastante impropia de los RTS, Warhammer Age of Sigmar: Realms of Ruin ha sido capaz de concebir un elenco cargado de carisma. Por supuesto, no es el único, más no por ello debemos desmerecer lo que ha conseguido Frontier Developments con aqueste su nuevo trabajo.

Esto, junto con el sempiterno empaque de una franquicia que dice ser histórica, ha provocado que sea un título con muchísima personalidad. Es más, diría que es capaz de recrear con mucho acierto la esencia del juego de mesa, pero con las bondades que solo un videojuego puede ofrecer. Así pues, a mí -personalmente- sí que me ha gustado la propuesta del estudio.

Estrategia para todo el mundo

Lo bueno es que, lejos de complicarse demasiado, en Frontier Developments han creado un juego para todo el mundo. Si bien es cierto que a veces el movimiento de las unidades se siente demasiado desacelerado, han sido capaces de encontrar la tecla para crear un proyecto afín tanto a jugadores avezados como novicios. Simple en la práctica, es más profundo de lo que podría aparentar de buenas a primeras. Igualmente, es cierto que los usuarios más hardcore podrían requerir algo más.

Por lo tanto, podemos concluir que no es un juego perfecto, pero que hace muchísimas cosas bien. Destaca, especialmente, en su trato del lore. A grandes rasgos, Realms of Ruin es todo un descubrimiento para los que quieran seguir profundizando en la historia de Age of Sigmar. En ese sentido, lo nuevo de Warhammer es realmente interesante. Es una de sus grandes bazas.

Eso sin olvidarnos de su preciosa dirección artística. Personalmente, me ha gustado mucho la forma en la que Frontier ha planteado sus diseños. El juego es muy llamativo y, desde el primer momento, entra por los ojos. Tanto por escenarios como por unidades, o banda sonora, Warhammer Age of Sigmar: Realms of Ruin tiene muchísimo encanto.

Los DLC le dan vida

Lo bueno es que sigue mejorando. Una de las grandes quejas de la comunidad de Warhammer Age of Sigmar: Realms of Ruin es que hay muy pocas facciones, por lo que era complicado seguir explorando el universo de AOS sin sentir que la experiencia era esencialmente repetitiva. Por suerte, sus dos nuevos DLC no solo palian parte del problema, sino que abren toda una frontera de posibilidades.

Warhammer Age of Sigmar: Realms of Ruin – The Gobsprakk, The Mouth of Mork Pack y Warhammer Age of Sigmar: Realms of Ruin – The Yndrasta, Celestial Spear Pack suman un nuevo héroe cada uno, respectivamente. Con esto en mente, tal vez podemos esperar que Frontier siga produciendo contenido, ya sea en forma de héroes u otros elementos. Por el momento, las facciones siguen siendo las mismas, pero hay más contenido y eso es lo que realmente me importa.

¿Por qué? Pues porque significa que no será uno de esos juegos que se publican y a otra cosa, mariposa. Lo más probable es que Frontier siga produciendo, creando y publicando nuevos contenidos con los que ampliar la experiencia base. Por supuesto, determinar si merecen o no la pena será cosa nuestra. De momento, a mí me han satisfecho, por lo que me reservo el derecho de seguir soñando con un futuro más que prometedor.

Foto: Cortesía

Fuente: marca.com

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