Luis Arráez y la rutina aplicada para conseguir dos títulos de bateo
Por Harold Capote
Existen argumentos estadísticos bastantes sólidos para afirmar que Luis Arráez es el mejor bateador del momento en las Grandes Ligas, más allá de la capacidad para fácilmente promediar por encima de los .300 puntos, o sus dos coronas de bateo consecutivas en ambas ambos circuitos, algo inédito en la historia.
Parte de esas explicaciones pasan, por ejemplo, por su diminuta tasa de ponches, 6.3%, la más baja de todas las Mayores y la única compuesta por una sola cifra entera, pues su más cercano seguidor en el renglón, Steven Kwan tiene 10%. Esto concierne a las 2 temporadas recientes.
Por supuesto que hay mucho más sobre las aptitudes de la “Regadera”, pero recientemente él mismo ha mencionado parte de su rutina al momento de pararse en el círculo de espera, compuesta como la de muchos peloteros, por acciones un tanto peculiares, supersticiosas par a los más escépticos.
En un material subido en redes sociales por Bally Sports Florida: Marlins, el muchacho de San Felipe explica parte de esas costumbres rituales que le caracterizan:
“Desde que piso la tierra digo ‘vamos a trabajar, ya tengo que ir a batear’; (…) todavía tengo un bate pequeño al que siempre le digo, ‘hey niño vamos a trabajar después, descansa que mañana es otro día’, esa es una de mis rutinas”.
“Mi rutina es levantarme feliz, llamar a mi entrenador de bateo, ‘vamos a trabajar’; cuando trabajamos con amor las cosas salen bien y esa es una de mis rutinas”.
En este material audiovisual igualmente participan otros compañeros del Luis Sángel en los peces, como Jazz Chisholm Jr., su paisano Jesús Luzardo; del mismo modo, Arráez menciona lo que fue una de sus gestas en 2023, el ciclo o escalera conseguida ante Phillies de Filadelfia.
Foto: Rederencial
Fuente: meridiano.net
